'Teitos' que cobijan pallozas y hórreos

Una de las construcciones más tradicionales de la arquitectura de Los Ancares es la palloza. Estas edificaciones tienen su origen en los asentamientos castreños de origen prerromano. Su planta es habitualmente oval, realizada con piedra de mampostería, y está recubierta con el tradicional 'teito', realizado con paja de centeno. En ellas vivían las familias con sus animales domésticos, que proporcionaban calor a la palloza, y también servía como pajar. Muchas de estas pallozas están ahora en un precario estado, puesto que su uso se ha ido perdiendo. Las más llamativas son las de Balouta, en del municipio de Candín, o el arruinado conjunto de pallozas de Campo del Agua, en Villafranca.
En Los Ancares también se pueden encontrar todavía algunos hórreos, también cubiertos con 'teitos'. Estas edificaciones se usaban como despensa para almacenar y resguardar los productos de la cosecha, pero se han ido abandonando al aparecer nuevos sistemas de conservación.
La pervivencia de esta arquitectura depende en gran parte del interés de los propietarios y de la ayuda prestada por las administraciones, aunque el turismo rural y la declaración como Reserva de la Biosfera son una gran oportunidad para rehabilitar y mantener en pie estos vestigios de historia berciana.